Si tienes un lomito en casa, seguramente en algún momento lo has visto revolcarse en algo que huele horrible. Puede ser tierra húmeda, un charco maloliente o, en el peor de los casos, restos de algún animal. Aunque para los humanos esto es asqueroso, para los perros tiene una razón de ser.
Por más domesticados que estén, los peludos siguen conservando muchos instintos de sus antepasados lobos. Uno de ellos es el de camuflar su olor. "Los lobos en la naturaleza suelen revolcarse en olores fuertes para ocultar su rastro de presas o depredadores", explica la doctora Laura Méndez, especialista en comportamiento animal de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Básicamente, cuando tu perrito se frota en algo apestoso, podría estar siguiendo este mismo comportamiento heredado. Aunque hoy en día ya no necesitan cazar ni esconderse de otros animales, el hábito sigue siendo parte de su naturaleza.
Otra teoría es que los canes usan los olores como una especie de "mensaje" para otros miembros de su grupo. En la naturaleza, un lobo que encuentra algo interesante puede revolcarse en él para luego llevar ese olor de vuelta a su manada, como si estuviera diciendo: "¡Miren lo que encontré!"
Tu peludo podría estar haciendo lo mismo, mostrando con orgullo que ha descubierto un aroma único y digno de compartir. Para nosotros es desagradable, pero para ellos puede ser una forma de comunicación.
¿Les gusta el olor?
Puede sonar increíble, pero muchos perros parecen disfrutar los olores que a los humanos nos resultan insoportables. "El sistema olfativo de los perros es mucho más complejo que el nuestro, y algunos aromas que nos parecen desagradables pueden resultarles interesantes o incluso placenteros", menciona el doctor Fernando Castillo, experto en etología de la Universidad de Buenos Aires.
Así que, si tu mascota encuentra un aroma que le gusta, no dudará en llevárselo consigo… en su pelaje.
¿Cómo evitar que lo haga?
Si bien este comportamiento es completamente normal, no siempre es agradable para los dueños. Si quieres evitar que tu peludo se revuelque en cosas apestosas, aquí algunos consejos:
Esté atento en los paseos: Si ves que se acerca a algo sospechoso, distráelo con un juguete o una golosina.
Refuerzo positivo: Cuando evite revolcarse en algo, prémialo para que relacione la acción con una recompensa.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
