Las gatas tienen la capacidad de reproducirse a lo largo de casi toda su vida, lo que puede llevar a embarazos frecuentes si no se controla adecuadamente. La edad en la que una gata puede quedar embarazada varía dependiendo de factores como la salud general, la genética y el entorno en el que vive. Es importante conocer estas variables para asegurar el bienestar de la mascota y tomar las medidas preventivas necesarias.
Edad de inicio de la fertilidad
Las gatas pueden entrar en celo y ser fértiles desde los cinco o seis meses de edad. Esto significa que a partir de esa edad ya pueden quedar embarazadas. Según la doctora Laura Torres, veterinaria de la Universidad Nacional Autónoma de México, “la pubertad en las gatas ocurre temprano y, una vez alcanzada, pueden tener varios ciclos de celo al año, especialmente en climas cálidos o en entornos donde haya luz artificial”. Esto se debe a que el ciclo reproductivo de las gatas está influenciado por la luz, lo que las hace poliestrales estacionales, con varios celos en una misma temporada.
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A diferencia de otros mamíferos, las gatas no experimentan la menopausia y pueden seguir reproduciéndose hasta edades avanzadas. Sin embargo, la fertilidad suele disminuir gradualmente a medida que la gata envejece, lo que puede aumentar el riesgo de complicaciones durante el embarazo y el parto. La mayoría de los veterinarios recomiendan evitar que una gata se reproduzca después de los siete u ocho años, ya que la probabilidad de que desarrollen problemas como distocia (dificultad para el parto) es mayor.
Estudios de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Glasgow sugieren que las gatas mayores de ocho años tienen una mayor incidencia de problemas de salud relacionados con la gestación y el parto, como el desgaste físico y las infecciones uterinas. Por lo tanto, aunque es biológicamente posible que una gata quede embarazada incluso en la vejez, no es recomendable desde el punto de vista ético y de salud.
Para evitar problemas relacionados con embarazos en edades avanzadas, la esterilización es la opción más efectiva y recomendada. Además de prevenir embarazos no deseados, la esterilización también disminuye el riesgo de cáncer de mama y problemas uterinos en las gatas. Es importante realizar la esterilización a una edad adecuada y bajo la supervisión de un veterinario.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.