Todos lo hicimos alguna vez y nosotros también nos declaramos culpables, luego por algún lugar del internet leímos que no era bueno jugar con un láser para los gatitos, pero el porqué no estaba claro. Hoy en Patas en Casa te contamos lo que dicen los especialistas al respecto y si deberías o no dejar que tu gato juegue con un láser.
Un rayo láser o un apuntador -según lo conozcas- es un objeto tan pequeño, pero que puede hacer que el gato salte, dé marometas, corra a toda velocidad y se entretenga un ratito. Se ve tan inofensivo que no nos cuestionamos si es seguro para los gatos juguetear con él. El láser para gatos puede ser muy perjudicial para la salud mental de los peluditos. ¿Cómo? Los felinos tienen el instinto de cazadores por naturaleza y se frustran cuando no logran atrapar una presa con éxito, y precisamente ocurre eso con el láser que aparece y de repente, desaparece sin tener oportunidad de tocarlo.
De acuerdo con la bióloga y especialista en comportamiento felino, Valéria Zukauskas; el láser para gatos puede causar problemas de comportamiento a largo plazo, después de varios intentos de atrapar el láser, es posible que el gato ya no quiera jugar después de un rato. Este comportamiento ocurre cuando se siente frustrado después de tanto esfuerzo.
Pese a la creencia popular, el láser no causa adicción, al contrario, en exceso y sin una recompensa final, hará que el gato pierda el interés. Con esta pérdida de interés surgen algunos problemas de comportamiento considerables, como ansiedad, nerviosismo y estrés. En algunos casos, el láser puede incluso hacer que un gato que normalmente es tranquilo, se torne agresivo con sus tutores.
“Algunos gatos empiezan a atacar a sus tutores, lo cual es natural, ya que quieren su recompensa”, sin embargo, no significa que no pueda utilizarse nunca, hay algunas opciones para no dejar de usar el láser para gatos y, aun así, recompensar al gatito: “Se puede usar un juguete donde la propia presa sea el láser, modelo que ya existe en el mercado, o bien ofrecer una golosina al final del juego. Esto hará que el gato entienda que está siendo premiado y, así, alcanzando la presa.” Afirma Valéria Zukauskas
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¿Cuándo sí y cuándo no utilizar el láser?
El uso del láser para gatos debe hacerse con consciencia y medida. Los gatos no entienden que la luz no es una presa, por lo tanto, no medirán esfuerzos para conseguir su recompensa. De repente, esa luz desaparece y el animal no entiende a dónde se fue algo que tanto deseaba.
“Veo a muchas personas usando el láser no como un juguete para distraer al gato, sino para distraerse a sí mismas: usando la luz para hacer que el gato salte. Eso es perjudicial. Por eso, debe usarse de manera consciente: movimientos bajos y sinuosos, imitando una presa”, explica Valéria.
El uso en exceso puede dejar al gato ansioso y estresado. Valéria Zukauskas, bióloga y especialista en comportamiento felino; explica que no se recomienda su uso si es utilizado por niños sin supervisión (porque muchos apuntan la luz a los ojos del gato), ni el uso del láser automático y por personas que solo quieren ver al gato saltar. La salud mental de los felinos es tan importante como la salud física. Vale la pena reflexionar y optar por alternativas para entretener al gato.
Alternativas del uso del láser
Puedes invertir en otros juguetes que no sean un láser para jugar con tu gato. Para ofrecer un juguete a tu felino, es necesario tener en cuenta algunas variables, como la edad, el tamaño, el nivel de energía y cuánto estímulo y actividad tiene por día. Cada gato es único y deberá ser estimulado por un objeto diferente. Valéria Zukauskas recomienda que el felino no tenga la oferta de juguetes a libre demanda y reciba variación en los estímulos, ya que puede aburrirse y no interesarse por ninguno. La idea es alternar los días y qué juguetes se ofrecerán. Por ejemplo, si el lunes estimulaste a tu gato a jugar con una varita, el martes es interesante ofrecerle un ratón de juguete relleno de catnip.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
