La memoria de los perros es un tema fascinante que ha llevado a muchos estudios para comprender cómo funciona y qué tan capaz es un perro de recordar a otros animales, como sus padres y hermanos. Aunque los perros no tienen el mismo tipo de memoria que los humanos, tienen una capacidad especial para recordar y reconocer a otros animales, especialmente aquellos con los que convivieron durante sus primeras semanas de vida. A continuación, se explora si los perros pueden recordar a sus familiares y cómo lo hacen.
Reconocimiento por medio del olfato
La memoria de los perros está fuertemente vinculada a su sentido del olfato, que es mucho más agudo que el de los humanos. Según un estudio de la Universidad de Estocolmo, los perros tienen una capacidad impresionante para reconocer olores, incluso después de largos periodos. Esto podría permitirles identificar el olor de sus padres o hermanos, aunque haya pasado un tiempo considerable desde la separación. La doctora Anna Pettersson, especialista en comportamiento animal, afirma que "la habilidad de los perros para reconocer olores familiares podría ser la razón por la cual muestran interés o comportamiento afectivo cuando vuelven a encontrarse con miembros de su camada".
Período crítico de socialización
Durante las primeras semanas de vida, los cachorros pasan por un período crítico de socialización en el que establecen vínculos con su madre y hermanos. Es en este tiempo cuando los olores y comportamientos de sus familiares quedan impresos en su memoria. Aunque los perros pueden olvidar ciertas experiencias específicas, los olores familiares tienen una alta probabilidad de ser reconocidos incluso años después.
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Sin embargo, la capacidad de un perro para recordar a sus padres o hermanos también depende del tiempo que pasó con ellos. Por lo general, los cachorros son separados de su madre y hermanos a las 8 o 12 semanas de edad, lo que puede afectar la duración del recuerdo.
La memoria afectiva en los perros
A diferencia de los humanos, los perros no recuerdan a otros individuos basándose en eventos específicos o detalles concretos. En lugar de eso, su memoria es más emocional y asociativa. Por ejemplo, si un perro se encuentra con un hermano que solía jugar con él, es probable que reaccione de manera amigable o excitada debido a la familiaridad del olor y los comportamientos compartidos. Según el doctor Stanley Coren, psicólogo especializado en el estudio del comportamiento canino, "los perros pueden mostrar respuestas emocionales positivas hacia otros perros con los que compartieron tiempo en sus primeras semanas de vida, aunque no los recuerden de la misma manera que un humano recuerda a un familiar".
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
