En los últimos años, el robo de perros en la Ciudad de México ha ido en aumento, lo que preocupa a dueños y organizaciones defensoras de animales. Este delito se ha vuelto especialmente común en zonas urbanas, y los perros de raza y aquellos con un aspecto peculiar se consideran más vulnerables. Según reportes de seguridad, el robo de mascotas se ha convertido en un mercado lucrativo debido a la alta demanda de perros de raza para cría, venta ilegal o incluso reventa en el mercado negro.
Los perros de razas específicas, como el Bulldog Francés, el Pomerania, el Shih Tzu y el Chihuahua, son los más propensos a ser robados. Esto se debe a que, además de ser pequeños y fáciles de transportar, tienen un alto valor de mercado, lo cual los hace atractivos para los ladrones. En palabras de la doctora Patricia López, especialista en etología animal de la Universidad Nacional Autónoma de México, “los perros de razas pequeñas y de aspecto exótico están en riesgo por el elevado interés que existe en ellos, tanto para la reventa como para el uso en cría clandestina”.
Otra razón para el incremento en estos robos es la falta de sanciones específicas y efectivas para quienes cometen este delito. Aunque algunas leyes en la Ciudad de México han comenzado a reconocer a las mascotas como miembros de la familia, en la práctica, la recuperación de un perro robado sigue siendo compleja y la investigación de estos casos suele quedar en segundo plano.
Precauciones para evitar el robo de perros
Para proteger a sus mascotas, los dueños deben tomar ciertas precauciones. Entre las recomendaciones de los especialistas en seguridad animal se encuentran:
- Evitar dejarlos solos: No es recomendable dejar a los perros sin supervisión en lugares públicos o afuera de tiendas, ya que pueden ser vulnerables a robos en estos espacios.
- Utilizar correas resistentes y seguras: El uso de correas de buena calidad y que no se puedan soltar con facilidad es una forma de evitar que alguien intente llevarse al perro.
- Microchip y placa de identificación: Colocar un microchip y una placa con información de contacto es esencial para facilitar su identificación en caso de robo o pérdida. Según el doctor Manuel García, veterinario y académico en la Universidad Autónoma Metropolitana, “los microchips han demostrado ser una herramienta útil para la recuperación de animales robados, siempre que se cuente con una base de datos actualizada”.
- Evitar publicar información detallada: Las redes sociales pueden ser un arma de doble filo; aunque permiten mostrar a la mascota, también pueden dar a conocer su ubicación y rutina. Publicar fotografías constantemente en sitios públicos puede llamar la atención de personas con malas intenciones.
Ante un robo, es importante presentar una denuncia inmediata y utilizar todos los canales disponibles, tanto digitales como físicos, para buscar al perro. Las redes sociales pueden ser útiles para difundir la pérdida, pero es recomendable ser cuidadoso con la información compartida.
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Concientizar a la sociedad sobre el problema es también fundamental para reducir la demanda de perros de origen sospechoso. Comprar mascotas sin verificar su procedencia alimenta este mercado ilegal y promueve el robo. La adopción responsable y el respeto por los animales son esenciales para combatir esta problemática.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.